El Diputado Enrique Quiñónez Tuckler, nació el 5 de noviembre de 1959 en la ciudad de Managua. Es hijo de Francisco Quiñónez y Enriqueta Tuckler. Esta casado con Regina de Quiñónez con quien tiene dos hijos, Enrique José y Carolina Regina.
En el 2002 y en su primer año de labor legislativa, el Diputado Quiñónez fue Segundo Secretario de la Comisión del Exterior, de la Comisión de Educación, Medios de Comunicación Social, Cultura y Deportes y fue Miembro de la Comisión de Asuntos Laborales y Gremiales de la Asamblea Nacional y Miembro de la Comisión Especial de Modernización en el año 2005 y 2006, Presidente de la Comisión de la Paz, Defensa, Gobernación y Derechos Humanos, para el periodo 2007-2009.
Edgard Enrique Quiñónez, se señala que cuando se dio el triunfo revolucionario del 19 de julio, éste se encontraba como cadete de la Academia Militar de Somoza, donde al llegar los guerrilleros sandinistas les rogó que le perdonaran la vida y que a cambio les daría entrenamiento militar.
Fue así que Enrique Quiñónez, por sus estudios militares, pasó a ser entrenador y fundador de las Tropas Especiales «Pablo Ubeda» del Ministerio del Interior, por lo que fue subordinado del entonces Comandante de la Revolución y titular de esa cartera, Tomás Borge Martínez.
Esa etapa de su vida es confirmada por los familiares del comandante William Ramírez, quienes señalan que Enrique Quiñónez contribuyó a forjar toda la estrategia y métodos de lucha que pasaron a formar parte de la imagen de las tropas «Pablo Ubeda» del MINT.
Luego deja de entrenar al MINT y huye con rumbo a Costa Rica y Guatemala, donde tiene que andar escondido porque los ex G.N. lo buscaban para pasarle la cuenta por haberse pasado al bando sandinista. Refiere esa curiosa biografía que en 1983, Enrique Quiñónez se contacta con «El Negro Chamorro», quien le da oportunidad de integrar un grupo armado en Honduras que se conoció como UDN-FARN, pero el grupo mencionado fue expulsado de ese país porque se vieron involucrados en un hecho que afectó a las tropas catrachas en El Espino.
Toda la guerra de los 80, Enrique Quiñónez, la pasa en Tegucigalpa despotricando contra la CIA y los altos mandos de la Resistencia Nicaragüense, sin que jamás volara un tiro, pero después apareció como comandante de la «contra».
Enrique Quiñónez regresa a Nicaragua en 1990, como un potentado que se quiso contactar con miembros del FSLN ofreciéndoles negocios, pero la oscura procedencia de su capital, puso en alerta a quienes eran buscados para hacer sociedades, expresan sus datos biográficos.
Luego, añaden, aparece comprando una lujosa mansión en las orillas de la Laguna de Xiloá y se lanza a la vida política en 1996 cuando corre como candidato a la presidencia de la República por el PRN, ganándole una elección al consuegro de Alemán, Fabio Gadea Mantilla.
En la mansión de Xiloá, a Quiñónez a cada rato le cortaban la energía eléctrica porque no pagaba, lo que fue denunciado en su momento por trabajadores de ENEL que se miraban impedidos de entrar a la mansión del hoy diputado, porque el poste con el transformador lo tiene encerrado en muros de cemento.
Desde 1996, hasta el año 2000, Quiñónez fue un acérrimo enemigo y crítico del gobierno de Arnoldo Alemán de quien decía barbaridades con su notoria falta de educación, pero dio un giro a su vida cuando aparece como candidato a diputado, declarándose un fiel arnoldista.
Actualmente es candidato por el ALN para elecciones del 2011 y como todo candidato espera tener éxito el 6 de Noviembre.
